Nuestro origen
CÓMO SURGIÓ LA IDEA DE CREAR INSOLENT
La primera vez que hablé con mis hijos, Paula y Juan Luis, sobre crear nuestra propia marca de relojes, gafas de sol, accesorios y complementos personales fue en el Tangana. Habíamos decidido pasar el día de playa en Tarifa y disfrutábamos de una relajante comida en este chiringuito.
Allí estábamos los tres, hablando de cómo queríamos que fuese nuestra marca en pleno verano, rodeados del bullicio surfero y con el rey del reggae sonando de fondo. Nos sentíamos tan entusiasmados que no nos dimos cuenta del jaleo, ni de dónde estábamos esbozando nuestros planes. ¿Lo adivinas? Exacto. ¡En una servilleta!
Inmersos en aquel ambiente pensamos que podíamos innovar con productos Premium, dirigidos a un público inconformista, emprendedor, rebelde y aventurero. Complementos que digan que ha conseguido lo que se ha propuesto o que está en el buen camino para alcanzarlo.
Hemos vuelto a comer más veces en el Tangana, pero siempre recordaremos con emoción aquel día, esa comida y la decisión tan importante que tomamos.
LOS INICIOS NUNCA SON FÁCILES
Cuando comenzamos a dar los primeros pasos con Insolent, no podíamos permitirnos contratar a nadie, ni diseñadores, ni desarrolladores, ni escritores, ni agencias de marketing.
Así que nos pusimos manos a la obra y construimos nosotros mismos nuestro sitio web. Al mismo tiempo, seleccionamos productos, localizamos proveedores y organizamos las diferentes funciones de cada uno. Poco a poco y casi sin darnos cuenta, habíamos transformado una web generalista en esta flamante tienda online de nuestra nueva marca privada.
En nuestra familia nos gusta el riesgo y la aventura y eso nos hizo ponernos en movimiento. Pero como también somos gente con los pies en la tierra, mantuvimos los trabajos que nos daban de comer hasta ver si nuestra idea y nuestros productos le gustaban al público que habíamos seleccionado.
Eso significa currar el doble y dedicarle al proyecto tu tiempo libre. En cierto modo, íbamos a cambiar nuestros hobbies por esto. La verdad es que no nos importó, ya que nos apasiona todo lo que tiene que ver con programas informáticos y con el mundo del comercio. De esta forma, empezamos a construir nuestra tienda online como si de un hobby se tratase.
CÓMO PRETENDÍAMOS MARCAR LA DIFERENCIA
A base de investigar un poco y gracias a nuestra experiencia comercial anterior, descubrimos cosas que nos sorprendieron sobre los componentes de los productos y los márgenes comerciales de muchas marcas.
La mayoría de las firmas de alta gama utilizan los mismos componentes o muy similares y por regla general, de los mismos fabricantes. Para colmo, los márgenes desde los costes hasta el PVP se nos antojaban astronómicos.
Visto esto, nos propusimos ofrecerte un producto Premium por el que tengas que pagar menos.
Para conseguirlo, debíamos evitar tres cosas fundamentales. Por un lado, eliminar los altos costes que supone el mantener un stock físico, sin perder por ello el control de la calidad de la producción. Lo segundo que debíamos reducir era el gasto de marketing y publicidad tradicional. Y por último, suprimir los márgenes minoristas.
EL DESAFÍO AL QUE NOS ENFRENTÁBAMOS:
Así las cosas, teníamos un gran reto por delante: ofrecer complementos de tienda de marcas a precios de canal online. Para ello, había que definir cuatro aspectos esenciales del negocio:
- Fabricar, siempre que sea posible, nuestro propio producto y de esta forma, evitar costes de intermediación cuando se pueda.
- Vender directamente a los clientes a través de nuestra tienda online.
- Evitar los elevados costes de marketing y publicidad tradicionales a los cuales muchas marcas son tan propensas.
- Aplicar márgenes que nos permitan sufragar nuestros costes de adquisición, tanto de productos como de clientes y nos generen unos beneficios suficientes para vivir de esto y crecer.
Consiguiendo esto, podremos ofrecer a nuestros clientes colecciones más amplias y nuevos productos cada temporada.
Además, los primeros adquirientes de nuestra enseña serán nuestros embajadores y si lo desean, podrán ayudarnos a diseñar los futuros productos Insolent, para que se adapten a lo que quieren nuestros seguidores.
NUESTRA RECOMPENSA A DIA DE HOY
Tardamos un poco en recibir pedidos, pero de pronto llegó el primero, a los tres días el segundo y así, poco a poco, hasta hoy. La verdad es que las ventas aún no nos permiten prescindir de nuestros otros trabajos, pero estamos inmersos en un importante proceso de transformación y quién sabe… quizás muy pronto eso cambie
Tenemos muy claro que debemos seguir trabajando por conseguir llegar a nuestros clientes y si podemos, proporcionarles el producto que les haga sentir más seguros de sí mism@s. Fieles a su carácter y personalidad.
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